La adolescencia es una etapa complicada: el revoltijo de hormonas y la incertidumbre, las ganas de encajar con el grupo que se enfrentan con el deseo de ser diferentes… Hoy, además, los más jóvenes reciben las críticas de sus mayores por quejarse por todo –«es que yo a tu edad…»– cuando, probablemente, ellos hacían lo mismo. El escritor Nando López recoge las historias de quince adolescentes inconformistas en su nueva novela, Cuál es tu lucha.
En ella, el autor teje las vidas a partir de testimonios reales de quince adolescentes entre 14 y 18 años, centrándose en sus preocupaciones e inquietudes. El autor sirve como recopilador de historias reales, que llegaron a él a través de las redes: en ellas hicieron un llamamiento a la generación Z para que, en un audio, quienes quisieran participar contasen cuál es su lucha, advirtiéndoles de que su testimonio podría servir para componer una novela.
Recibieron una respuesta tan abrumadora que tuvieron que hacer dos cribas. Al principio, iban a ser solo diez testimonios, pero López se vio incapaz de escoger y amplió el relato a quince, sobre todo para que hubiese diversidad de perfiles y temáticas. «Buscamos aquellos que tenían el mayor número de temas diversos, por un lado; la mayor cantidad de situaciones diferentes con las que pudiera identificarse mucha gente; y también, algo que para mí era muy importante es que fueran temas que dieran voz a cuestiones de las que no siempre se habla», aclara el autor.
Así, se abordan cuestiones como los trastornos de la conducta alimentaria, el bullying, los problemas de identidad sexual, de la soledad, de la incomunicación… Problemas que, aunque no son nuevos, sí hoy se ven amplificados por las redes sociales, que han cambiado el comportamiento de la injustamente llamada generación de cristal. «Es una generación muy consciente de la salud mental, muy consciente de la importancia de la inclusión… Es decir, lo que vemos en este libro es su consciencia del problema y su voluntad de cambiarlo», subraya el autor.
Para él, una de las claves esperanzadoras son los puntos en común que unen historias tan distintas: la solidaridad entre quienes contaban la historia para que su ejemplo pudiese acompañar a otros que se encontraban en esa misma situación y el optimismo de que, al final, se supera. Puedes leer más en esta entrevista de Mariángeles García en Yorokobu.
