Earthship: así es una casa sostenible sostenible DIY

Casi por definición, nuestros hogares deben, como mínimo, cubrir necesidades básicas como proporcionarnos comida, refugio, energía, gestión de residuos, tratamiento de aguas grises y negras y agua potable. Un earthship hace todo eso con materiales reciclados y el mínimo gasto energético.


En las alturas del desierto rojizo de Taos, Nuevo México, existe una comunidad de peculiares viviendas sostenibles que, entre la inmensidad de cañones, valles y pueblos indígenas subsiste desconectada de todo tipo de red de suministros. Semienterradas, de estéticos diseños circulares y grandes ventanales, los earthships –barcos de tierra– acompañan el paisaje desértico con sus construcciones hechas de materiales naturales y reciclados como neumáticos, adobe, latas y botellas de cristal. Así, desafiando la hegemonía de construcción y diseño, un earthship es mucho más que el fruto de una arquitectura sostenible: es una casa viva y cualquier persona puede construirla.

La idea provino del arquitecto Michael Reynolds en la década de los años 70 cuando su preocupación por la contaminación y la dificultad de acceso a la vivienda en Estados Unidos le llevaron a experimentar con los primeros prototipos de construcciones de material reciclado. En concreto, los neumáticos, un material muy contaminante y del que había una gran abundancia. «El earthship nace en un contexto cultural muy específico. En la crisis energética de los años 60 y 70 Estados Unidos había tenido unos crecimientos en consumo energético continuados del 5% anuales en combustibles fósiles dedicados al transporte. Las dimensiones tan grandes de ese país hacen que los camiones de transporte desgasten neumáticos a una velocidad increíble», explica Borja Izaola, arquitecto jefe de proyecto en Green Building Council España (GBCE).

Finalmente, los earthships se volvieron tan sofisticados y autónomos que actualmente cooperan elementos de diseño que incluyen masa térmica, energía solar, pequeños molinos de viento, un sistema de ventilación natural, recogida de lluvia y nieve en cisternas y tratamiento de sus propias aguas. Incluso hacen crecer alimento para consumo humano y algunos pueden utilizar biodiésel. «Tienen que estar orientados al sur. Así, no acumulan calor en el verano porque la inercia térmica del suelo, al estar semienterrada la vivienda, se mantiene», explica Izaola. En ese sentido, los neumáticos, al estar protegidos pueden tener una duración de hasta mil años. «La durabilidad es un factor clave de la sostenibilidad», añade.

Earthship en Nuevo Mexico.

Actualmente hay cerca de 3.000 Earthships en diversas partes del mundo. La empresa Earthship Biotecture of Taos de Nuevo México, capitaneada por Michael Reynolds es la que se encarga de dar difusión, construir o enseñar a quien quiera a construir su propio earthship. Así, según la filosofía de la bioconstrucción del arquitecto, las seis necesidades básicas del ser humano son: comida, refugio, energía, gestión de residuos, tratamiento de aguas grises y negras y agua potable. Este tipo de viviendas brindan todas esas necesidades al estar desconectadas de cualquier red de suministros y ser completamente autosuficientes. «¿Quieres una casa y la quieres sin hipoteca y libre de facturas desorbitadas de luz y de gas? Pues lo que quieres es un earthship», sentencia Miguel Pérez, portavoz de Earthship Spain.

¿Y si quiero construir mi earthship en España?

«Un earthship es una vivienda, por lo que se deben cumplir códigos técnicos y normas urbanísticas. Los técnicos que intervienen en el diseño y en su legalización tienen que intentar que el resultado final sea una vivienda autoconstruible por los propios promotores o propietarios», explica Pérez. Así, los earthships que se encuentran en España deben cumplir ciertos requisitos.

Laura y David son una pareja británica que comenzó su andadura con la arquitectura sostenible en 2006. Lograron conseguir un permiso de construcción en un año para construir su Earthship en Almería. Sin embargo, las licencias para poder habitarlo tardaron hasta siete años, el mismo tiempo que tardaron en edificar la vivienda. Eso sí, para ellos todo ha valido la pena: «Nos mudamos en 2014 y nos encanta vivir aquí, es hermoso. Hay mucha luz gracias al ventanal tan grande de la casa y nos sentimos como que estamos afuera todo el tiempo, vivimos con la naturaleza», explica Laura.

Interior de una earthship.

El secreto para el funcionamiento adecuado del earthship es muy sencillo: hay que vivir en él. Lisa y Oscar querían tener una vivienda sin hipoteca y acabaron siendo los pioneros en construir este tipo de casas en España. «Tienes que pensarlo como una máquina que está en funcionamiento. Si no vives en dentro, decae rápidamente. Vives en la casa pero también vives con la casa», puntualiza Lisa. Su casa en Valencia es actualmente de 25 metros de largo y diez metros de profundidad y tardaron cuatro años en construirla y llevan ya 16 años viviendo en ella. «Donde estamos en invierno siempre baja hasta cero grados, y dentro de la casa la temperatura mínima a la que hemos llegado ha sido de 17 grados. En verano el máximo que hemos alcanzado ha sido de 27 grados, lo cual está muy bien cuando fuera se llega a los 40 grados. El suelo siempre está fresco y la ventilación es buenísima», narra Lisa.

El precio a pagar por una vivienda totalmente sostenible es que su construcción requiere mucho tiempo y esfuerzo físico. «Hay que estar dispuesto a ensuciarse y a buscar materiales gratis en el entorno. A partir de ahí, la clave es empezar por la planificación de un proyecto pequeño que tenga la posibilidad de crecer, antes de empezar con un proyecto grande que parezca inacabable», explica Pérez. Sin embargo, este tipo de viviendas están lejos de ser un boom en nuestro país. «Me sorprende que las subidas continuadas de los precios de suministros y alquileres no despierte más el interés en España por los earthships», cuenta Pérez. Eso sí,  su convicción es absolutamente optimista: «Llevo muchos años construyendo, y he visto a personas que sin conocimientos previos, han acabado siendo excelentes constructores».

SUSCRÍBETE A NUESTRA NEWSLETTER

Igluu, con su consentimiento, tratará sus datos para enviarle la newsletter. Para el envío se utiliza MailChimp, ubicado fuera de la UE pero acogido en US EU Privacy Shield. Puede ejercer sus derechos de acceso, rectificación o limitación, entre otros, según indicamos en nuestra Política de privacidad.