La llamada de la urgencia no debe paralizarnos. Ante el hundimiento del ánimo colectivo, busquemos inspiraciones compartidas.
Da igual que se trate de la defensa de una causa legítima o en la divergencia cotidiana, pero ya no nos permitimos el saludable espacio de discrepancia mutua. El decibelio ensordecedor de los insultos y descalificaciones al otro, por el simple hecho de no ser capaces de aceptar que se puede pensar diferente, nos aturde. El macroestudio Democracy Report 2022, elaborado por la Universidad de Gotemburgo, reveló que nuestro país ha duplicado su radicalización política en la última década.
Mientras la crispación por quién grita más fuerte nos agota, el calor sin precedentes del mes de octubre en España hizo que se pulverizasen 107 récords en dos días. A nivel mundial, el mes de julio de 2023 fue el más caluroso de la historia, tanto en la temperatura del aire como en la de los océanos. La escasez de hielo en la Antártida alcanzó un nuevo techo en septiembre y los glaciares suizos perdieron más superficie que ningún otro año antes. Los meteorólogos creen que 2023 podría terminar siendo el año más caluroso jamás registrado. Llegados hasta aquí, a muchos la despolarización silenciosa les quita el sueño y a otros el ruido de la polarización no les deja dormir.
Con este nuevo número de Igluu, queremos precisamente reivindicar la calma, la escucha, pero también hacer una llamada a la reflexión. Acercarnos a la temida o anhelada IA buscando progreso, entender la soledad no deseada para evitarla, hablar de música y escuchar a la cultura. En la entrevista a la artista Coco Dávez, nos dice que no hay nada más inspirador que una conversación. La llamada de la urgencia no debe paralizarnos. Ante el hundimiento del ánimo colectivo, busquemos inspiraciones compartidas.
Cuando en 2004 visité Patagonia, todavía no era fan de la marca del mismo nombre ni mi consciencia ambiental me condicionaba como ahora. Con cierta ilusión ignorante esperaba presenciar en directo el derrumbe del Perito Moreno, el glaciar más famoso de El Calafate. El estridente desplome no ocurrió en aquella ocasión y, desde entonces, guardo la foto de color azul-hielo-puro con nitidez en mi memoria. Hoy revisito mis recuerdos y reinterpreto el significado; al hacerlo, el silencio me acompaña.
