Entrevistas a Adriana Domínguez y Manuela Carmena, arquitectura, viajes, gastronomía, salud mental, urbanismo, videojuegos… La puerta de Igluu se abre a lo grande con un primer número cargado de actualidad y diseño.
No vamos a engañarte y decirte que montar algo como esto es fácil, pero ya en la primera reunión, los equipos de 21gramos y Yorokobu teníamos clara una cosa: hay una nueva forma de vivir de forma más consciente que atañe a todos los ámbitos de nuestro comportamiento y nosotros queríamos crear una revista para recogerlos. Ahora, tocaba ponerse manos a la obra para hacerlo posible, y la primera tarea era desmontar dos prejuicios muy arraigados. Dicho de otra manera, demostrar con Igluu que ni el lifestyle tiene que estar necesariamente ligado a la frivolidad o la superficialidad, y que hablar de sostenibilidad o consumo consciente no tiene por qué implicar soltar discursos desde una atalaya moralista y esnob.
Bajo esa premisa, hemos intentado construir un proyecto sólido que ha cristalizado en la web en la que estás leyendo esto y en un primer número que es una declaración de intenciones en forma y fondo de lo que vas a encontrar en Igluu. Hablamos de moda y paciencia con Adriana Domínguez y de política y vejez con Manuela Carmena, y recogemos las palabras de Cristina Monge, de María Sánchez y Luna Miguel, cinco mujeres que demuestran, con su ejemplo, que eso del lifestyle consciente tiene muchas caras, muchos nombres y mucho que decir y que pensar.
También hablamos de cómo romper con los prejuicios generacionales y tender puentes para salvar lo común, de las nuevas formas de construir edificios y ciudades, de cómo la crisis climática afecta a nuestra salud mental y cómo los creativos han puesto a funcionar su talento para concienciar a las empresas y a la población general, que también quiere jugar en verde. Te traemos el ejemplo de Ovillo, un restaurante que demuestra que la sostenibilidad tiene que ver con mucho más que el medioambiente, y nos vamos de viaje al valle del Silencio, un lugar que no podría llamarse de otra manera.
¿Te has quedado con ganas de leerlo? Echa un vistazo y entra en Igluu.